Que levante la mano aquél que no haya visto jamás una infografía.
Seguro que no la levantáis ninguno, ¿verdad?
Todos sabemos que, hoy en día, el marketing de contenidos es fundamental para cualquier marca que se precie, puesto que gracias al contenido de calidad, esa marca puede posicionarse como experto en un determinado sector. Pero, no solo de posts vive el hombre. Quiero decir que existe una gran variedad de contenidos que podemos utilizar y crear para hacer nuestros perfiles más variados y no hacer que el usuario caiga en el aburrimiento al saber qué es lo que vamos a ofrecerle en todo momento.
Aparte de los posts escritos en un blog, los vídeos, las presentaciones o los podcasts, tenemos al alcance de la mano un recurso muy interesante y efectivo para lograr crear un buen contenido. La infografía.
La infografía es un recurso gráfico en el que se muestran datos de forma muy visual, algo que nos beneficia en tanto y en cuanto es más sencillo recordarla que un post para nuestros ojos y nuestro cerebro. Una infografía puede ser un recurso muy valioso a la hora de asentar conocimientos o realizar una explicación de una forma sencilla de un tema que sería, de otra manera, más complicado de explicar.
Así pues, ¿cómo hacemos una infografía? ¿Qué necesitamos?
Obviamente, una infografía de calidad necesita un contenido de calidad. Para ello, lo que haremos será establecer qué queremos decir y reuniremos cifras y datos referentes al tema que queramos reflejar en ella.
Una infografía, por otro lado, no es un post, no tiene que ser largo, sino todo lo contrario: tiene que ser lo más breve, clara y concisa posible. Nuestra infografía tiene que tener datos que enganchen, si metemos demasiado contenido, estaremos realizando un estudio.
Respecto al diseño, cabe decir que no existe un botón mágico que pulsándolo nos dé el diseño perfecto de la infografía. Crear una requiere ideas, saber estructurarlas y mucha creatividad para crear un diseño más que atractivo, que enganche.
Podemos empezar por coger un papel y dibujar tus ideas, dibujar tu infografía, crear tu diseño, para darle, posteriormente, una vuelta de tuerca. La infografía es creatividad, así que deja fluir tu imaginación. Piensa cómo podría encajar tu diseño con la información que quieres proporcionar.
Una vez la tengamos hecha, es hora de ponernos manos al ordenador. Podemos usar para crear nuestra infografía un programa de diseño, como Photoshop o programas especialmente diseñados para hacer infografías, como por ejemplo Easel.ly, Visual.ly u otras (aquí tienes 11 herramientas). Y ten mucha paciencia, no creas que esto es rápido, sobre todo, si la infografía que tienes en tu cabeza y en tu papel es elaborada en cuanto a estilo y diseño.
¿Y tú, cómo creas las infografías?
2 comentarios
Estamos totalmente de acuerdo contigo Inma! En Pyme Up (http://pymeup.com/) levantamos las dos manos si hace falta porque es habitual encontrarte con muchas infografías cada vez que consultas algún contenido en la red. Y es que la verdad es que consiguen informar con una forma muchísimo más atractiva que un simple redactado y por ello son cada vez más utilizadas. Nosotros estamos muy a favor de sus ventajas y pensamos igual acerca de la manera de crearlas. Un saludo.
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